El FMLN siempre lleva las de perder.

No es posible que habiendo pasado más de 20 años, casi todas las ocasiones donde puede ganar el FMLN salgan con una derrota tras otra, muchas veces la culpa es de otros pero en otras es de ellos mismos.

Actualmente el FMLN es el partido en el gobierno pero el presidente Mauricio Funes, se ha desentendido del partido que lo llevo a la silla presidencial para declararse independiente, que hay que gobernar quitándose la camisa de los partidos políticos dice, que bien; para alguien que solamente va a estar cinco años en la presidencia esta bueno pero para un partido político que busca el mejor porvenir para el pueblo salvadoreño, cinco años es solamente el inicio de un proyecto de nación, donde hay adversarios con dinero y muchas mañas que es necesario ahogarlos políticamente, pero volviendo al principio, alguien que solo durará cinco años no le interesa, no tiene partido entonces no tiene adversario directo que lo perjudique a lo largo de una vida, para que desgastarse en buscar casos de corrupción pasados si ya voy de salida.

También la estrategia de la derecha actualmente es el decir que las cosas buenas que haga “el gobierno del cambio” son preparadas por Funes y las malas por supuesto pensadas y desarrolladas por el FMLN.

Anteriormente cuando terminó la guerra se dijo: no hay vencedores ni vencidos, en clara alusión a los miembros de la guerrilla del FMLN y del ejército, muchos generales con dinero crearon la mayoría de las millonarias empresas de seguridad privada, los comandantes del FMLN que dejaron todo por la libertad del pueblo salvadoreño se fueron a ver si sembraran en las parcelas que les regalaron. Los generales del ejército se jubilaron recibiendo jugosas pensiones de más de 2000 dólares (y ni les alcanzan pues muchos tienen ranchos en la playa, vicio de whisky, mujeres y maricones) en cambio los comandantes del FMLN hasta ya se aburrieron de ir a ver si les consiguen un hueso en el gobierno para por lo menos tener una pensión mínima, pero esos puestos no son del partido, tampoco de Funes sino de los amigos de los amigos de Funes: Cáceres, Salumes, Meléndez y otros. Algún buen día llegará mis buenos amigos del Frente, su lucha será recompensada.