A VOTAR

Los que votan con la cabeza son aquellos que escuchan, analizan, discuten se informan y luego toman su decisión.

Se necesita estudiar la realidad nacional, la historia, los movimientos políticos y sociales, las propuestas de los candidatos, su hoja de vida, el equipo que los acompaña.

Otro tipo de votante es aquel que atiende más a la satisfacción de sus necesidades físicas (los que se 'saltan' un tiempo de comida han aumentado según las encuestas). Este es el que vota con el estómago. Es decir que marca en su papeleta el símbolo del partido que le ofrece soluciones relacionadas con el aumento del empleo, baja de precios de la canasta básica, del combustible y otros afines.

El ultimo tipo de votante es el que vota con el hígado, movido por el rencor, los que culpan al gobierno de todo lo malo que les pasa (no todo que conste, ellos no controlan el clima y terremotos), especialmente en lo económico, por lo que exigen un cambio; cambio drástico. Su decisión está motivada por la cantidad de bilis que han acumulado durante tantos años de sufrimientos, es a lo que la derecha llama resentidos sociales (algo natural, por el trato que reciben de la sociedad en su estructura general).

De la manera que usted vote: estómago ó hígado tenga por seguro que terminará satisfecho(a) , porque al menos se habrá desahogado.

Una vez desahogado puede pasar a pensar con la cabeza y colaborar para construir un gobierno democrático, social y pluralista desde sus propias comunidades.

Recuerde: si está condicionado para votar con el hígado o el estómago, reaccione, piense , que no lo engañen con propuestas vacías los mismos que lo han llevado a pensar con el estómago y el hígado, tampoco deje que le metan miedo con el terrorismo mediático, piense en su familia, piense en su país. Vote con cualquier tipo (estómago ó hígado), pero vote por el cambio, los que pensamos con la cabeza ya no lo soportamos (a este gobierno) y estoy seguro que usted tampoco.